Beneficios de tomar yogur helado
El yogur helado es un postre que a menudo se promociona como una alternativa saludable al helado, ¿pero realmente lo es? La respuesta es un rotundo sí. Uno de los errores más comunes de la gente es pensar que se trata un simple helado, sin embargo, su perfil nutricional es muy diferente al del yogur normal.
Hablamos de un postre bastante conocido y elaborado a base de yogur que presume de una textura cremosa y un sabor agridulce. Es, por supuesto, bastante similar al helado, la diferencia es que se hace con leche en lugar de nata, eso sí, al igual que cualquier helado, se suele vender en bowls o conos con una variedad de opciones de topping entre las que destacan frutas, galletas y chispas de chocolate.
Los ingredientes pueden variar ligeramente, dependiendo de si se prepara a mano o no, pero tienden a incluir leche líquida o en polvo, fermentos lácticos como Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus y azúcar.
Desde Gelatería Italiana Deliziosa vamos a ahondar en las bondades de tomar yogur helado.
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Tomar yogur helado: ¿Qué beneficios aporta a la salud?
El yogur helado puede tener más beneficios para la salud que otros postres fríos, ya que contiene nutrientes y bacterias positivas, así como niveles más bajos de lactosa y menos calorías que el helado tradicional. Veamos a continuación sus aportes para el cuerpo humano:
Fortalece el sistema inmunológico
Al igual que el yogur normal, algunos yogures helados contienen probióticos. Es decir, bacterias buenas que si se ingieren pueden tener efectos positivos en la salud, como fortalecer el sistema inmunológico.
Los beneficios de los probióticos en el yogur helado, sin embargo, dependen de si sobreviven al proceso de fabricación. Si, por ejemplo, el producto se pasteuriza después de agregar los probióticos, este proceso los mata, por lo que no todos estos postres contienen bacterias beneficiosas.
Adecuado para personas intolerantes a la lactosa
Quienes son intolerantes a la lactosa normalmente desarrollan problemas digestivos como hinchazón, gases y dolor por comer productos lácteos. Eso sí, la mayoría de las personas con este tipo de intolerancia son capaces de ingerir pequeñas cantidades de algunos productos lácteos, sobre todo si contienen probióticos, como en el caso de nuestros helados de yogur.
Ello se debe a que los probióticos descomponen parte de la lactosa, lo que reduce la cantidad por porción.
Favorece los huesos y menos calorías
El yogur helado también contiene cantidades razonables de algunos de los nutrientes relacionados con la buena salud de los huesos, como el calcio y las proteínas. Además, si estás tratando de reducir las calorías, este postre supone un excelente sustituto del helado normal.
Un complemento natural
Cuando el postre que te gusta se convierte en medicina para el espíritu y el cuerpo, sobran las excusas para consumirlo con frecuencia. El yogur es un alimento rico en fermentos lácticos y proteínas de alto valor nutricional, además de ser una fuente de calcio y vitamina D, valores esenciales para la salud de los huesos y la piel.
En el helado de yogur, la rica densidad se combina con la suavidad del helado, de hecho, el sabor ligeramente ácido logra hacer una perfecta simbiosis con la plenitud de la fruta madura.
Podemos decir, además, que un yogur helado sin nata es un snack que puedes disfrutar si sigues una dieta, o que también puedes acompañar con otra especialidad para transformarlo en una comida completa.
Diferencias con el helado tradicional
Ya lo comentamos, el yogur helado puede ser una adición saludable y sabrosa a tu dieta, sin embargo, a diferencia de la mayoría de los yogures normales, este postre suele contener una gran cantidad de azúcar añadida. La presencia de este ingrediente antes de congelarse evita que se formen grandes cristales de hielo y asegura que se mantenga una textura cremosa similar a la del helado.
También hace que el sabor sea más apetecible, por lo que es dulce y ácido, en lugar de ácido. Por este motivo, si sigues una dieta baja en calorías, es fundamental prestar atención y ser consciente de que el yogur helado puede contener más azúcar añadido que el yogur azucarado normal.
Ahora, las diferencias entre el yogur helado y el clásico helado también son significativas. La principal es que el yogur helado está hecho con leche y no con crema. Ello implica que el helado tradicional contiene más grasa. A pesar del nombre que suena saludable, el yogur helado es un postre como el helado.
Realmente ninguno es mejor que el otro, pero puede ser más saludable si no se le añade grandes cantidades de azúcar.
Conclusiones
No hay duda, el helado es un manjar irresistible, tanto en invierno como en verano, pero un postre tan delicioso corre el riesgo de volverse un poco pecaminoso para tu figura si no tomas las decisiones correctas. Para no renunciar a un descanso fresco y sabroso, el yogur helado se erige como la unión perfecta entre el placer del helado y la salubridad del yogur.
Las propiedades del yogur no necesitan muchas presentaciones, incluso, su versatilidad lo convierte en un ingrediente para mezclar en cualquier receta. El helado de yogur es una suave experiencia natural que llena la boca sin apelmazar el estómago.
Te aseguramos que las propuestas de Gelatería Italiana Deliziosa conquistarán tu paladar con la cremosidad de un helado fresco mezclado con productos seleccionados, sin colorantes, conservantes ni químicos aditivos. De hecho, los helados de yogur los preparamos en proporción al consumo, varias veces al día, con materias primas de temporada y artesanales.
Todo ello, hace que el resultado final sea aún más genuino y saludable, ya que las calorías se desvanecen en el primer sabor.
Un catalán con propósito italiano que decidió recuperar la receta de las antiguas dueñas, unas italianas que hacían un helado tradicional de éxito en el barrio de Graçia y llevarlo a las zonas con más encanto de Barcelona.